Cosmonaut Volkov: showroom de fantasía

En tiempos de crisis la creatividad se agudiza y se convierte en moneda de cambio para llegar a la cumbre del éxito, así que a más creatividad, más éxito. La clave reside en el hecho de saber diferenciarse del resto. (lo siento, me sale la vena publicista)

En el sector de la moda está todo un poco visto : compra y venta en mercadillos, por Internet, blogs de moda, yo te enseño esto tu compras aquello, etc.
Así que es agradable descubrir nuevas iniciativas relacionadas con este mundillo, y más si presentan un aspecto renovado y con ingredientes de calidad, como es el caso de Cosmonaut Volkov.

Este proyecto de aires vintage y de difícil pronunciación (todo es practicar) nace de la imaginación y las ganas de inovar de dos jóvenes barcelonesas, Ana y Aina, que como ellas mismas explican, pretenden mezclar "arte y música, entre muchas otras cosas invisibles a los ojos".

El pasado 15 de Diciembre, Cosmonaut Volkov se dio a conocer oficialmente en sociedad, con un showroom donde se mostró la primera colección de la marca.

Invitación para asistir a la Showroom inaugural

El caso, es que fui a la inauguración con mi amigo Jesus (soy su culo, y él mi mierda) y a parte de un pequeño imprevisto inicial (nada relacionado con equivocarse de portal y no darse cuenta hasta al cabo de un tiempo suficiente como para cuestionarse el umbral de la inteligencia) el showroom estuvo a la altura de las expectativas y no nos defraudó en absoluto.

Fue una tarde de domingo relajada, de charloteo, vino y rodeada de buen gusto. A continuación las fotos que lo demuestran. 

La decoración se movía entre la sencillez y el minimalismo, aunque con toques de cultura kitsch  

Un proyector amenizaba la visita. El guiño a lo retro con la captura de pantalla de Moonrise Kingdom  me conquistó

Si queréis investigar y cotillear un poco qué se traen entre manos y dedales estas dos barcelonesas, no dudéis de entrar en su tumblr oficial http://cosmonautvolkov.tumblr.com/ o enviar una solicitud de amistad a su perfil en Facebook Cosmonaut Volkov. 

  

                              

Mucho Lost y poco Found. Lost&Found Weekend

El pasado fin de semana tuvo lugar otra edición del cada vez más conocido Lost&Found.
La gracia está en que ha durado los dos días: sábado y domingo, así que la oportunidad para encontrar algo era mayor. Las alternativas eran la siguientes: ir durante la mañana del sábado, para encontrarlo todo fresquito y disponible o ir el domingo para comprar lo que quedara pero más barato.

O también podías ir el sábado por el mediodía y no encontrar casi nada, como nos ocurrió a nosotros. Pero no por la variedad de la oferta precisamente, sino por el boom de gente que se acercó al mercadillo.

La cosa empezó bien, no podía hacer mejor día: el cielo estaba azul, la temperatura era ideal (casi no necesitabas ni chaqueta) y pasear por el casco antiguo de Barcelona resultaba más apetecible que nunca. Aunque al llegar a la Estació de França el hechizo se rompió, ya que estaba a petar y era imposible agacharse para buscar entre los capazos y los cestos llenos de ropa.

Eso sí, había de todo. Y cuando digo de todo es de todo, nunca pensé encontrar, por ejemplo,  un alargador de ciertas partes íntimas en una parada de mercadillo.

El ambiente estaba muy animado: cerveza, música y un histerismo general para encontrar las mejores gangas. Las cosas que vi que más podían valer la pena eran unas chaquetas militares, en formato parka y abrigo, que me conquistaron des del primer momento. También vi unas creepers a 10 euros, un regalo si lo comparas con lo que vale cualquier modelo en la realidad.

Finalmente me compré dos collares de la marca Mochitti, aunque me costó decidirme por cuál de los muchos que había, y un poster del evento (vale no lo compré, pero queda muy bonito en mi habitación).

Para los que son más de audiovisual que de foto, aquí dejo un vídeo resumen de las dos jornadas en el Lost&Found. bye, bye!

               

Mezclas explosivas: No Hunger Festival + The Hives

Aviso a todos los navegantes: esta entrada es más larga de lo habitual, coged provisiones para el trayecto

El 2 de diciembre fue un gran día, y una magnífica forma de pasar un domingo y acabar un fin de semana. Pero también fue un poco odisea intentar coordinar los dos eventos a los que acudí, el último por casualidad y gracia del destino.

Empezaré por el final, para liar un poco.

El NoHunger Festival es, en esencia, un festival de música, pero no uno cualquiera, sino un festival de buenas intenciones. El cartel también resulta excepcional, no solo por la música, sino por los valores que se esconden detrás.

¿De qué va el asunto?
NoHunger Festival es un proyecto organizado por "Acción Contra el Hambre", con el que se pretende recaudar fondos para luchar contra el hambre.
La idea surgió cuando varias bandas del panorama indie nacional decidieron unir fuerzas- y compases- para recaudar dinero a favor de acabar con situaciones como la de que más de 7000 niños mueran al año en todo el mundo por desnutrición.

         

Realmente me parece una gran idea, ya que puedes aportar tu granito de arena en forma de una pequeña aportación (12€ o dos cubatas, para los que utilizan esta unidad de medida). De todas formas soy más de hacer que de dar, pero esto ya es otro tema.

Me encanta el lema de esta año "We can be heroes just for one day", ya que transmite a la perfección el carácter de este evento. Por cierto, se trata de un guiño al himno escrito por David Bowie en la década de los setenta.

Por el escenario pasaron los grupos de The Pinker Tones, con la colaboración del siempre tan excéntrico Albert Pla; los de Klaudia junto a los de Cuchillo; Mujeres, Susan's Red Nipples y Elvira, aunque a dos de ellos no pude verlos, a falta de un giratiempos (no quedaban en los chinos).

Parada para comprar merchandising del festival

Susan's Red Nipples

Klaudia + Cuchillo: fantásticos, nunca una aglomeración en el escenario me había resultado tan abrumadora

Todos los grupos desprendían adrenalina en el escenario, pero si me tuviera que quedar con alguno de ellos sería con Susan's Red Nipples, no solo por el nombre (afortunados los pezones de esta tal Susan), sino porque los descubrí ese mismo día. Y no hay mejor forma de descubrir a una nueva banda que no sea encima del escenario.

Cuando dieron las 9.30pm tuve que ausentarme durante más de media hora porque... tchan, tchan, ¡luces, tambores!, ¡ese mismo día me tocó una entrada para The Hives! Máxima felicidad. Hasta que me enteré que era en el mismo día/hora/lugar que el NoHunger Festival. Y de ahí la necesidad de tener un giratiempos.

Pero no lo cambio por nada del mundo, ya que el concierto fue alucinante. Estos chicos tienen una presencia espectacular en el escenario y una facilidad para mover a las masas en los conciertos que ni moisés con los mares.
Cuando entré en la sala 1 de Razz, justo empezaban a tocar la conocida "Hate To Say I Told You So", así que la excitación del colectivo era palpable en el ambiente. Luego, fue una sucesión de grandes singles, uno detrás del otro: el mítico "Tick Tick Boom", los nuevos "Come On!" y "Go Right Ahead"... vaya, que yo ya no sabía si saltar, sonreír, hacer fotos, cantar o parecer una epiléptica haciéndolo todo a la vez.

Pelle Almqvist estuvo a la altura de las circunstancias, y muy cercano con el público, que se crecía a medida que el concierto avanzaba. En varias ocasionas hizo uso de su spanglish más irónico, chapurreando frases entre el castellano y el catalán. 
En mitad de una de las canciones, nos hizo sentar a todos en el suelo y estar atentos a lo que nos pedía: ir poniéndonos de pie a medida que el ritmo de la música se aceleraba. 
No pude hacer una foto del momento porque, evidentemente, se me acabó la batería de la cámara... hola murphy.

En definitiva, me enamoré de las cinco suecos del escenario, vestidos con sus respectivas camisas blancas y pantalones de oficina. Arrebatadoramente magníficos.